domingo, 24 de enero de 2010

Parece que es la hora de las reflexiones:
..."Jamás seré la esposa de nadie"...
..."Es mejor ser amante, porque el matrimonio se arruina, cuando se vive en pareja"...

Cuánta razón tuvo Coco Chanel al decir esas palabras, al menos a ella le sirvió y gracias a que se creyó lo que dijo en su momento, llego a ser inmortal, y poder decir "la moda soy yo.."

Será, como me dijo un amigo mio, que mis platos, van mas allá de lo gourmandise, y que lo importante, es el sabor de lo que comen? a ver si me lo creo yo también, y espero que algunas de mis recetas, puedan trascender los ángulos de mi mesa, ya que un simple panaché de verduras y carne, logra que cuando la gente lo saborea, ponga esa cara de ojitos revoleados, o cerrados; narices que intentan descifrar los aromas; y las bocas cerradas mientras mastican un éxtasis de sabores...

Juro que no pongo demasiada faena, ni tanto empeño, ni demasiada atención o tiempos medidos por relojes, para hacer las comidas, solo me guío por los olores que brotan de las ollas, o del horno, y de los crepitares de los vegetales, en la sartén enmantecada, para saber en que punto está la comida, si es hora de dar vuelta algo, o de bajar los fuegos...

ahora tengo sueño, que raro en mí, para escribir mi panache de esta noche, pero mañana prometo, contaros como lo hago yo, no es nada caro, y podemos leer un libro cualquiera mientras tanto, u hojear la ultima revista de vanity fair, o de G.Q, o ver una película en la tele, mientras dura el hervor de todo...

Doña Naty, una cocinera que tuvimos muchos años en Argentina, decía siempre, que las manos que olian a cebolla o ajo, eran dignas de una reverencia, al mejor estilo Luis XIV, yo procuro que no sean tan así, y al terminar de cortar, pelar, macerar, rayar, o incluso cortarme, fregármelas con un trocito de limón, y adiós problema...

Como Chanel , que era famosa, porque de su cuello, siempre pendía una tijera, en mi caso, siempre tengo un repasador colgando de mi cintura, y en el delantal las manchas de la condecoración del plato terminado...

Hasta mañana