domingo, 11 de julio de 2010

Como he solido decir en varias oportunidades, es momento de levantar la púa del disco de vinilo, y haciendo ruido, como si lo rayaramos, mi vida debe tomar un rumbo diferente al planeado...

..."El hombre propone, y Dios dispone"...

Puazo entonces...

Mientras tanto, focalizo mi mente, en una imagen a vuelo de pájaro...

Desde arriba y bien alto, veo un buque, de un blanco inmaculado, como una mancha en el mar, y rodeado de fiordos del mar del norte, y ciudades, con nombres extraños e impronunciables, Reijkiavik, Akureyri, Alesund, Hellesylt, Geirangen, Olden, Berger, Copenhague, Tallin, etc, que mojan sus pies, en ese mar de un azul profundo, que le dan paz a mi alma...

Necesito deletear el disco rígido, y comenzar a cargar nueva información, o diferente, cuando logre estar de nuevo en la paz de mi hogar, solo, sin meandros que me provoquen dar marcha atrás, volver, subir y bajar, por los vericuetos del recuerdo...

Ya veremos...