martes, 23 de marzo de 2010

La gran primera guerra del 14, paso a llamarse mundial, cuando entró en el conflicto armado, los Estados unidos, pero fue una guerra donde hubo en juego no solo la vida de millones de soldados, sino millones de kilómetros cuadrados de territorios, ya que en el año 1915 , cuando entro en guerra Italia, ya habían demasiados territorios en combate…

Territorios y colonias, cuyos gobernantes y soberanos, habían realizado una carrera armamentista sin precedentes en la historia de la humanidad.

Fue la guerra de las nuevas tecnologías; tanques, fusiles automáticos, ametralladoras, los primeros aviones biplanos, cuyo acompañante del piloto usaba las ametralladoras y arrojaba las bombas de gas mostaza desde el aire, y a mano…más un montón de etcéteras, que ni vale la pena recordar…

Fue también la guerra de las trincheras…
Las tumbas abiertas a cielo limpio, donde murieron atrozmente, enfangados y con tifus y malaria, millones…

El ambiente de tensión que se había creado el 28 de junio del 1914, con el asesinato del Archiduque en Sarajevo, fue el que desencadeno una fatal serie de uniones y alianzas que desembocaron en la Gran Guerra

Las potencias y reinados, que habían hecho alianzas en el pasado, cumplieron fielmente sus promesas, con lo que el asunto de ésa guerra fue mas política, que necesaria.

El imperio Austríaco - Húngaro de los Habsburgo, del que pertenecía el Archiduque asesinado, exigió que se cumplieran, y a la época, dicho imperio era el mas poderoso, con lo cual se vieron involucrados varios continentes, el europeo, el asiático, el arábigo, el japonés, y hasta México!!!!...

Estados unidos, sólo tomo partido luego del hundimiento del buque de pasajeros Lusitania, mandando al fondo del mar a miles de civiles.

En pocos meses, desde junio a finales de Agosto del 1914, ya estaban en guerra Alemania, Austria, Hungría, Rusia, Francia, Reino unido y Bélgica…
Lo demás es historia conocida…

No fue, sino hasta el año 1915, que Italia declara la guerra al imperio alemán, cuando firman un tratado secreto con el Reino Unido y en que mi abuelo partió al frente, con el cargo de Capitán de la Guardia Real, y cuyo destino fueron las trincheras del corredor Alpino…

La posición de Italia en la Alianza había sido cada vez peor.
Tras arreglar sus pleitos coloniales con Francia y obtener su beneplácito para la anexión italiana de Libia en 1912, las diferencias entre Italia y Austria-Hungría se habían hecho cada vez más evidentes.
Ambas potencias discutían siempre por la hegemonía en el Adriático e Italia aspiraba a territorios poblados por italianos bajo el dominio de Viena.
Tras declararse neutral el 3 de agosto de 1914, el gobierno italiano inicia una negociación con ambas alianzas.
Finalmente, en abril de 1915 firma el Tratado secreto de Londres con la Triple Entente. En él se le promete a Italia la anexión tras el fin de la guerra del Trentino, el Tirol meridional, Trieste, Istria, parte de Dalmacia...
Italia cambia de aliados y entra en la guerra junto a la Entente.
Su viaje, el de mi abuelo, que había comenzado hacia ya un año, retomaba su destino…Los Alpes Italo-Austriacos/húngaros…

El empleo de sustancias tóxicas en la guerra había sido prohibido por la Conferencia de la Haya, sin embargo, cuando los frentes se estabilizaron, los alemanes, que tenían una industria química muy desarrollada, pensaron en este tipo de armas como una solución para acabar con la guerra de trincheras.
A las 4 de la tarde del 22 de abril de 1915 en el frente Belga y aprovechando el viento favorable, los alemanes abrieron botellas de cloro y una nube tóxica se dirigió hacia las líneas francesas. La sorpresa y el pánico fueron totales. Tras sucesivos ataques, los alemanes consiguieron en unos días avanzar 16 kilómetros.Era el tristemente famoso “Gas Mostaza” usado incluso, en las actuales matanzas de Irak, y en la 2da.Guerra mundial.

La industria química y armamentística inició la producción de nuevos gases (fosgeno, bromuro de xileno, arsénico, ácido cianhídrico...). El repertorio del horror tóxico se fue ampliando.
Los gases empezaron a lanzarse en bombas de artillería para evitar que un repentino cambio del viento hiciera que las propias tropas murieron asfixiadas.
Los ejércitos desarrollaron sistemas de defensa y alarma. Los soldados tuvieron que proveerse de máscaras anti-gas, dando lugar a una de las múltiples imágenes siniestras de la Gran Guerra.

Imágenes que obviamente, no llegaban al pueblo Italiano, y menos allá lejos, en la Sicilia, donde mi abuela, junto a tantas comadronas tejían guantes, abrigos, gorros, etcétera, porque sabían que los recursos económicos, del entonces Rey se habían agotado, y mientras tejían, repicaban las campanas de muerte, en funerales, donde en el altar se hacían misas sin el cuerpo presente, y con solo el esqueleto de un ataúd de madera cubierto por terciopelo negro y violeta, con un nombre escrito a mano, en una hoja…
Cuantas mujeres, no tuvieron un cuerpo que llorar o un lugar donde enterrar, sus maridos, hijos, hermanos, tíos, y amigos, quedaban para siempre, sepultados bajo montañas de escombros, o en la más absoluta de las soledades, en bosques nevados y congelados…

Si bien el sentimiento era egoísta, mi abuela siempre respiraba con alivio, cada vez que alguien gritaba por las calles, el nombre lacónicamente telegráfico, de los soldados muertos, y en ese elenco jamás figuro el de mi abuelo…

Muchos de ustedes se preguntaran, el porqué de estas historias, y la necesidad de contarlas, pero saben qué pasó?

Estuve llamando a Sicilia, a Roma, a Milán, para conseguir la receta exacta de las famosas FRASCATOLES, que desde hace bastante les debía, y al hablar con mis tíos, tías, y primos de mi madre ( todos octogenarios pasados, y uno de ellos nonogenario), una receta llevo a una cosa, y a otra y a otra, y rescaté cosas que me contaron, y vivieron, incluso en primera persona, y en vez de ir anotando los pasos de la receta, anotaba como un poseso los detalles, de estas historias…

Demás está decirles que hasta que no consiga, harina de guisantes (arvejas), en mi próximo viaje a Sicilia, no podré pasarles la receta, porque acá en España, la busco, pregunto y me miran con cara de “que dice, señor???”…

Realmente, la cultura culinaria española, deja mucho que desear, sus platos son básicamente a base de arroces, pescados, mariscos, tortillas de patatas, chorizos, y muchas comidas de cuchara…
Tienen muchos chefs con estrellas michelin, pero de esos que cuando te traen el plato, ves un cuadro de comida abstracta, enmarcado en 33 centimetros de loza, y que te llenan solo una carie.
Sí, las cosas populares, son ricas, pero de ahí a tener una vision mas amplia de determinados productos, hay que ir a lugares especializadísimos a ver si se consiguen y si se tiene la suerte de encontrarlos, te cuestan los dos ojos de la cara…

( CONTINUARÁ)…