viernes, 11 de marzo de 2011

Estoy aterrado!!!!!....

No debería haber escuchado a nadie!!!!

Cada uno me dá una versión diferente, y la que menos, me dice que alucinan como si uno fuera un protagonista de una película de las de SAW...

Qué atroz!!!!!

Que si ponen unos ganchos, para tener los parpados abiertos....

Que si se ve todo!!!!!!....

Que cuando ves la jeringa de la anestesia acercándose al ojo!!!!!

Y digo yo, no es mejor en estas operaciones que den anestesia total, y saquen el ojo fuera, y lo trabajen como si fuera algo de arcilla?...
Yo lo preferiría!!!!

Y pensar que hay algunos que dicen que el verde del uniforme de los cirujanos, me excita!!!!

Y una mierda!!!!!!

Si creo, que no tengo ni una carie, y todos los dientes son míos, por el simple cagazo que me dan las cosas éstas, que hacen con anestesia local y uno puede ver y oír todo!!!!

Cada vez que voy a hacerme una limpieza de dientes, me tienen que dar como cinco anestesias, porque siento el dolor!!!!

Calentarme los quirófanos!!!!!! Seré loco, estaré mal de la cabeza, pero boludo no soy...

A mi que me den anestesia total siempre y una vez dormido, que me hagan lo que quieran, no estamos de acuerdo????

Bueno, me iré a ver si logro dormir un cachito, y quitarme así los nervios, que en 6 horas y media mas, me operan...

Cuando vuelva a poder ver, os contare...

Chau!

martes, 1 de marzo de 2011

Y con ésta van...

Hoy me dio un ataque de risa, mientras iba caminando por los pasillos del “Clinic”, donde me han operado y tienen mi historia clínica, la que cada vez que la agarran ( cojen) dicen: ..joder! Cómo pesa ésto!!!!!...

Es que mientras caminaba, pensaba, éstos me ven llegar y pensaran que soy un Fiat 600 del año 1965...
Chapa, pintura, revision mecánica, cambios de aceite, filtros, frenos...

Cuando me calmé (tuve que sentar para reírme, no fuera cosa que encima me vinieran a buscar enfermeros creyendo que me había escapado del loquero), subo a la 4ta.planta, y me dice el endocrinólogo ( al que voy a revision cada 4 meses, por mi “switch duodenal” o cruce duodenal):

...Te tengo buenas noticias! El 11 te operaremos de uno de los ojos, y al mes del otro!!!!...Ya vas a poder tirar a la mierda las putas gafas!!!!...

Me senté y solté una carcajada de lo más ordinaria!...Claro, el pobre medico no entendería nada!!!!

Le explique porqué me reía, y me dice:
ves? Ésa es la actitud!!!!...

Claro, total, el culo es mio, los ojos también, la panza, etc...etc...
Tengo mas recauchutajes que ése vehículo!!!...
Tú crees que me sentiré y veré algún día mejor????

Allí, se largo a reír el medico...

Ésa es la actitud le dije yo...

Agregándole:
oye, y si me dais un quirófano, así me ahorro el dinero del alquiler? O una habitación que nadie use!!!! os la pondría monona y cuca!!!

En fin...

Como dice mi amigo Charly, Dios proveerá y lo que nó, de algún culo saldrá!!!!!

El poder de dar

Ayudar, dar y escuchar llena de significado la propia vida

Creo en el consenso. Los políticos no deberían basar su triunfo en machacar al adversario. Soy cristiano

Y por eso sé que ayudar, dar, compartir, consolar, escuchar profundamente y ser empático, valorar al otro, solidarizarse,beneficia psíquica y físicamente al que recibe y al que da.

La prosocialidad, es uno de los componentes para disminuir el fracaso, y pretende equipar emocionalmente a grupos de personas marginadas en diversos aspectos de la vida.

Hoy quisiera centrarme en La Prosocialidad para parejas inteligentes y como todo son nuevos desafíos.

Sí, y he observado que esperar demasiado de la comunicación crea problemas en la pareja y cuando todos creemos que era por la falta de ella, nos damos cuenta que la comunicación, si no es de calidad, crea perturbaciones y ruido.

Puedes estar diciendo una cosa con tus palabras y otra con los gestos, la mirada y la actitud. 

La actitud dice más que las palabras. 

Y de forma inconsciente. En las relaciones de pareja debe haber un equilibrio pas-pro.

Qué que es eso? Un equilibrio entre amor pasional y amor prosocial, que es aquel que se interesa en primer lugar por el otro, que da todo el espacio al otro, que descentra el propio, que no parte de sus intereses, sino que trata de escuchar a fondo al otro. A partir de ahí vendrá un enriquecimiento para el yo y también para el tú. Hay que ser maduro y generoso para eso.

Sin este tipo de amor, la pareja se ahoga en los sentimientos centrados en el yo. Quien invierte en el otro construye y mantiene la pareja. Pero la pasión es la chispa.

El amor pasional es un amor gratuito, ¡fantástico!, un regalo que no tiene coste.
Te llega de repente, sí.

El amor prosocial tiene un coste, requiere esfuerzo, es altruista, procura más funcionalidad y apoyo al otro, pero dota a ambas personas de la pareja de un gran significado de autenticidad. La comunicación prosocial es la que acepta totalmente al otro.

Y se aprende con ayuda, escucha, consuelo, empatía, valorar al otro, ser solidario. Y se debe practicar con un adversario o alguien antipático.
Plantean una acción y comprueban qué pasa al llevarla a cabo. 

Las ventajas de la prosocialidad previenen la violencia, mejoran el clima grupal e interpersonal, el tono vital del que da, la salud mental del autor y del receptor de la acción. 

De acuerdo, amor prosocial. ¿Y cuando desaparece la pasión? 

El amor prosocial es un gran nutridor de la pasión, porque si tu pareja te dedica tiempo, esfuerzo e ilusión, tu pasión renace. 

Y Entonces, ¿por qué todas las parejas andan a los gritos? 

Se tiene que aceptar que hay desacuerdos y aprender a manejarlos, debatirlos con calidad comunicativa; centrar la atención en conseguir una auténtica relación. 
Eso no implica estar de acuerdo. 

Pero sí tener como objetivo un encuentro entre el yo y el tú, y sobre la base de la comprensión mutua, tomar las opciones más adecuadas, ponernos de acuerdo sobre nuestros valores y establecer reglas de conducta para seguirlos. 

Entonces, hay que ser inteligente. Pues sí...
Pero no estamos hablando de coeficiente intelectual, sino de las múltiples inteligencias que nos llevan a conseguir un buen equilibrio pas-pro.

Entendido?

Hay que perseguir una igualitaria participación en la toma de decisiones. Una comunicación de calidad, explicitar las expectativas, y un respeto y autonomía en el crecimiento personal de cada uno. 

Muchas personas aplican la prosocialidad en países en conflicto, niños de la calle, escuelas, con resultados excelentes.
La prosocialidad estimula la creatividad y la iniciativa, se puede desarrollar en todo momento y aplicar a cualquier situación y persona. 

Se trata de hacer algo por alguien, y favorecer el altruismo. Hay que enseñar los comportamientos del dar y mostrar los beneficios.
La empatía es algo que tenemos naturalmente, pero la hemos cubierto de polvo, capas y capas de cultura, costumbres y maneras de tratarse.

La prosocialidad se debe enseñar y entrenar para no olvidarla. 

Nos han enseñado a procurar por nosotros mismos. 

Con el modernismo nos ha llegado la asertividad, es decir: mantener mis derechos sin hacer daño al otro; pero la perspectiva prosocial da un paso más allá.
Dice: yo voy a empezar por el otro, voy a interesarme por el otro. Vaciarse para acoger al otro. 

Y eso tiene recompensa.

Gracias a la acción prosocial, las emociones negativas mejoran, y la salud. Ponerse en el lugar del otro calma la tendencia irascible y resuelve rencores y envidias.
Cada uno de nosotros tenemos la posibilidad de ser más conscientes de lo que nuestros actos y palabras producen en los demás. 

Esa consciencia es poder. Aumentando los actos de ayuda, de dar, de escuchar, de ser empático con el otro, de valorarle, y veremos como sentirá un significado en su nuestras vidas y mejorará nuestra autoestima. 

La respuesta no es siempre positiva, pero ponernos en la piel del otro enriquece mi capacidad mental, me abre al mundo.

Si yo envío un mensaje con sinceridad, en el 70% de los casos mi acción incide y es multiplicadora, porque si alguien tiene un gesto bueno y sincero contigo, tu actitud y las decisiones que tomes en ese momento cambian.
Esa acción produce una cadena de acciones. 

Y a sabiendas que eso no se puede medir, sabemos que un puñetazo en un grupo aumenta las posibilidades de que haya otro: lo mismo sucede con las acciones prosociales.