ATENTADO EN MANCHESTER, Y EL MUNDO EN EL QUE VIVIMOS...

Hace apenas un rato acabo de despertarme y, como siempre me dispuse a leer mis siete periódicos de alrededor del mundo.

Hoy me detuve solo en uno de estos periódicos, ¡e inmediatamente fui a encender la tele!

El atentado de Manchester (U.K) me dejo helado!

Cuando vi que era real, desperté a mi amigo Aitor (¡vive allí!!!!) y lo encontré (¡menos mal!)

Y no puedo más que pensar que durante toda mi vida, intente mentirme a mí mismo, creyendo que nunca más me tocaria de cerca.

Fui testigo e indirectamente afectado con los resultados de dos atentados terribles de joven, en Argentina.

Uno, la voladura de la embajada de Israel (pase cerca con un taxi) y, al tiempo fue la voladura de la AMIA (¡otro centro judío!), donde la explosión dejo de costado al autobús donde iba de pie, cómodamente y feliz con mi walkman a todo volumen y de repente me vi envuelto en humo de polvo y, salimos todos por las ventanas de emergencia, tuve que caminar sobre restos destrozados y rostros desfigurados y petrificados, como si no creyeran lo que les había sucedido.

Aitor! ¡Cómo no iba a llamarte a esa hora de la madrugada!!! ¡Joder!!!!!

…

¡Después de todo eso, me prometí que esas cosas no me afectarían, que no podían ser verdad! Pero lamentablemente ¡Es verdad!

¡TODO ES UNA GRAN MENTIRA!

¿Qué haría yo?

Empezar todo de nuevo. A iniciarlo y demostrarme que soy un guerrero que ha sobrevivido por los pelos en muchas oportunidades.

Así pues, aprendí que un guerrero aprende a defenderse antes de ser atacado. Allí descubrí que los seres humanos somos hombres, mujeres, niños y ancianos. Y, cuando descubrimos que somos solo eso. HOMBRE. MUJER. Aprenderemos que bastará con que alguien tome la decisión que sea.

Por eso también pienso que solo deberíamos disfrutar lo que vivimos.

Me refiero a disfrutar el presente, mientras dure.

Sentir que la vida a veces me da treguas y que así deberíamos aceptarlo todos.

Sera así que, aceptando el mundo de mierda en el que vivimos esta vida, puede traernos esta clase de consecuencias.

Aceptemos también que están las personas que están en las nubes y no podemos culparlos.

¿Qué se puede hacer? A lo mejor les resulta más cómodo, ser prisioneros de sí mismos, y vivir una vida más allá de la realidad, ¿no? Tengo amigos que así van por la vida y, no los culpo.

A veces creo que les tengo envidia, porque viven dando vueltas, noche y día, a la espera de sus propios apocalipsis, y por eso no se enteran de lo que pasa.

Ya hemos tenido varios de ellos y ocurrieron otras veces. Es muy probable, que sin unas manos férreas por parte de los gobiernos (¡con un Brexit no se logra!)  

Por eso sugiero, que en cada uno de nosotros exista un guerrero. Nada pudo detener los apocalipsis de las historias de la humanidad. Ni antes ni ahora.

¡Seamos realistas! Si no tienes alma de guerrero, si no somos fuertes, es muy probable que muramos en el intento.

¿Y sabéis qué?

Es cuando me tomo 5 minutos, me tomo un té y me doy cuenta que hemos de disfrutar de la puta vida al máximo!!!!

Pero ¡CUIDADO!, ¡NUNCA DEJES DE GUERREAR!, eso sí, ¡nunca le cagues la vida a nadie! ¡Guerrea defendiendo tu libertad!

¡LO DIGO MUY EN SERIO!

Hoy Manchester, y sus cuerpos destrozados.

Mañana, Dónde, Quién, Cuándo.

También estoy convencido que debemos mirar cada momento, de ahora en más, como un tiempo prestado y dejar vivir a la vida y que esta nos sorprenda, pero nó con estas cosas.

Podemos dejar que la gente viva la vida como quiera, tienen sus derechos. Lo tengo, pero tengo claro que, si salgo a la calle en bolas y con un plumero en el culo, he de tener en cuenta que no molestaré al resto que me vea y es allí, en la decisión, que comprenderé que mi derecho comienza cuando termina el tuyo.

Es por eso que sé que, antes que todo se termine, he de estar con la gente que quiero a mi lado.

No he de pasar más con el tiempo que nos queda, preocupándonos por saber cuándo se acabara. Hoy, ¡NÓ!

Por los muertos y heridos de Manchester. Recemos, de la manera que sea. ¡Ellos no han tenido la culpa!

Estas cosas me deprimen! Este escrito era un borrador para hoy escribir otra cosa, a alguienes, que tú sabes era para ti.

Pero me deprimí. Vuelvo a la cama. Tal vez allí encuentre consuelo.